El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, presentó su sexto y último Informe de Gobierno, en el que afirmó que su sexenio (2018-2024) concluirá con un crecimiento económico del 1 por ciento anual en promedio.
López Obrador destacó en el evento multitudinario en la Plaza de la Constitución de la Ciudad de México los logros de su administración, en particular en materia económica, social y política.
El crecimiento del 1 por ciento anual estuvo por debajo del 4 por ciento planteado en promedio para toda su gestión en el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024, al calcular un avance del Producto Interno Bruto (PIB) del 6 por ciento en el último año de Gobierno.
“El sexenio, aun con la pandemia, esa crisis que no se había visto cuando menos en el último siglo de nuestra historia; esa caída en la economía por la pandemia que afectó a México y al mundo, aun con eso vamos a terminar el sexenio con un crecimiento promedio del 1 por ciento”, expuso López Obrador.
El mandatario mexicano insistió en que, a pesar de todo, el crecimiento promedio del PIB (1 por ciento) es algo “verdaderamente excepcional, ante un entorno económico extremadamente difícil en el país y en el mundo”.
López Obrador, quien entregará el mando a su sucesora Claudia Sheinbaum el 1 de octubre próximo, dijo que la economía pudo avanzar a pesar de la pandemia y de la crisis global por el conflicto en Europa del Este.
Dijo que gracias a las políticas públicas de la llamada Cuarta Transformación, por primera vez en décadas disminuyó la pobreza y la desigualdad, además de sostener que México es uno de los países más atractivos para la inversión, al recibir en los primeros seis meses del año 31 mil millones de dólares de inversión foránea.
Entre 2018 y 2022 salieron de la pobreza 5,1 millones de personas, “algo que no sucedía en más de 30 años“, sostuvo el presidente mexicano con base en datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
Sostiene reforma al Poder Judicial
López Obrador aseguró que el paquete de reformas que presentó el pasado 5 de febrero, tuvieron como propósito restituirle a la Carta Magna, “el sentido revolucionario y popular que tuvo desde su redacción original en 1917”.
El mandatario aseguró que desde que inició su sexenio, hace casi seis años, lo primero que hizo fue reformar la Constitución, “hasta donde se pudo, y promover leyes para frenar la política antipopular, entreguista y corrupta, que se había impuesto y legalizado por el predominio de un poder oligárquico con apariencia de democracia”.
“Estas iniciativas son, a todas luces, distintas y contrapuestas a las reformas que se aprobaron durante los 36 años del nefasto periodo neoliberal, cuando no se pensaba en beneficiar al pueblo sino en ajustar el marco legal para facilitar el despojo de bienes del pueblo de la nación a una minoría rapaz”.
Asimismo, AMLO expresó que “afortunadamente, ya estamos viviendo en una verdadera democracia”. Cabe recordar que las reformas a las que se refieren incluyen las que interfieren en el Poder Judicial de la Federación, el Instituto Nacional Electoral (INE), desaparecer los órganos autónomos, entre otras.
Acompañado por diferentes gobernadores, así como de la presidenta electa, López Obrador reafirmó también su llamado al Gobierno de Estados Unidos a respetar la soberanía de México.
En el evento multitudinario de poco más de dos horas destacó a los programas sociales como los pilares fundamentales de su Gobierno, entre ellos los apoyos económicos para adultos mayores, personas con discapacidad, estudiantes y madres solteras.
Previo a finalizar su Informe de Gobierno, López Obrador agradeció también al pueblo de México el respaldo brindado a su gestión.
“Me voy a jubilar con la conciencia tranquila y muy contento (…) nada me hace más feliz que haber logrado (…) reducir la pobreza y desigualdad”, concluyó.
